Me he levantado para comer. Que desgracio que soy. Bueno, pensandolo bien que afortunado soy. Despues de toda la semana trabajando me he podido levantar cuando me lo pedía el cuerpo.
Pienso que me estoy haciendo mayor para esto de salir. Yo antes salía me iba de día para casa, dormía 3 o 4 horitas y ya estaba listo para el día siguiente.
Ahora me levanto a las mil, como y al sofá. Menos mal que tengo por obligación pintar que si no podria pasarme el día entero tumbado. Ya he pinado mi habitación y el pasillo.